La serie BC-5A-M son cargadores de baterías de última generación con alta eficiencia y bajo costo en un cuerpo metálico compacto. Los cargadores están diseñados para soportar altos niveles de perturbaciones que se encuentran en la red eléctrica. Los cargadores de la serie BC-5A-M son prácticamente imposibles de destruir, ya que tienen protección contra sobrecarga, cortocircuito, alta temperatura y protección contra inversión de polos de la batería. La protección contra sobrecarga es de tipo limitador de corriente, no de tipo Hiccup. Los cargadores protegidos contra Hiccup se apagarán en caso de sobrecarga y no podrán cargar una batería vacía a su corriente nominal.
En caso de una condición de cortocircuito o sobrecarga, el cargador BC-5A-M no se apaga y simplemente suministra la corriente nominal, lo que permite la carga a máxima velocidad de una batería vacía. En caso de sobrecalentamiento, el cargador reducirá automáticamente su corriente de salida y continuará con el funcionamiento normal.
Los cargadores ofrecen detección automática del voltaje de la batería. De esta manera, el mismo módulo funciona tanto a 12 V como a 24 V sin necesidad de selección manual, lo que elimina los errores humanos. Los cargadores BC-5A-M tienen un rango de voltaje de entrada de 170-305 V, lo que permite su uso en la mayoría de los países con voltajes nominales de 220 V CA a 277 V CA. La salida nominal está completamente disponible en todo el rango de 170-305 V CA sin reducción de potencia. Los cargadores BC-5A-M ofrecen un modo de funcionamiento respetuoso con el medio ambiente. El modo verde consiste en reducir la frecuencia de funcionamiento cuando la carga disminuye. De este modo, los cargadores reducen sus pérdidas, ayudando a proteger el medio ambiente. Con cargas muy pequeñas, entran en un modo de flotación para reducir aún más el consumo. Los cargadores tienen un consumo de energía muy bajo en modo sin carga, lo que ayuda una vez más a proteger el medio ambiente. La eficiencia máxima de los cargadores supera el 91,5%, lo que resulta en menores costos operativos a largo plazo. Por ejemplo, en comparación con un cargador de 24 V/5 A con una eficiencia del 85%, con una carga media del 30% y 20 años de vida útil, el BC-5A-M consumirá 600 KW-horas menos de energía eléctrica. Esto se traduce en un gasto de energía de aproximadamente $132 menos por cargador.
La salida de falla del rectificador puede activar un relé o transmitir el estado operativo al controlador del grupo electrógeno, que emitirá una alarma en caso de falla.
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